Hace un tiempo me proponían en una tienda regalar algún reloj para los lectores de ZonaCasio.com, y luego, Casio se ponía en contacto conmigo, diciéndome que disponían de "sabroso" material de merchandising y que estaban pensando regalarlo a través del blog. Les dije que no, y de hecho los relojes que me solían sobrar tras reviews o de los que quería deshacerme, los fui regalando a amigos o/y a ciertos lectores habituales del blog.
Y es que, ya hace algunos años, he decidido no realizar sorteos. La razón de ello es muy simple: las veces que lo he hecho (tanto en Zona Casio, como en otros blogs y publicaciones), el resultado ha sido bastante ingrato. En una ocasión regalamos pegatinas y tuve que casi rogarles a la gente para que las cogiera. No sé, pero cuando yo era joven (claro, de esto hace lustros ya...), te regalaban un adhesivo de tu página, revista o marca favorita, y bailabas por peteneras. Ahora no sé si la gente está un poco de vuelta de todo, empachada con tantos gadgets o tecnología, o tan rodeada de tantos artículos de todo tipo, que no agradecen nada. O más bien, más que agradecer, diría que no aprecian nada.
Si regalas un producto elitista (como la vez que regalamos un Resist Black de edición especial y limitada, nada más y nada menos que con caja roscada y recubrimiento DLC), es tener a una persona contenta, y a cien descontentos. De hecho, en aquella ocasión el afortunado envió fotos y mostró su regalo en blogs y páginas ajenas a nosotros, y ni siquiera nos hizo llegar una foto con su reloj para que hiciésemos un reportaje. Claro que en este aspecto no digo nada: cada uno es libre de hacer lo que quiera con su regalo.
De manera que prefiero hacer regalos directos a personas en concreto, que sortear nada, porque cuando sorteas lo único que creas es descontento para la mayoría (porque los afortunados solo pueden ser unos pocos): descontento con la publicación, y descontentos con la marca. Y tal vez, encima, quien se lo lleve ni siquiera lo aprecie y ni lo quiera.
Prefiero, como sí hemos hecho en varias ocasiones, regalar cosas - a veces no poco interesantes, por cierto - para todos en general, como catálogos electrónicos, ebooks, o revistas en formato pdf o similar, que se puedan repartir entre todos. De esta manera ninguna persona se siente disgustada, y no hay nadie que no resulte premiado.
| Redacción: Estación Telegráfica / EstacionTelegrafica.cc / EstacionTelegrafica.blogspot.com
Yo también aprendí esa la lección. La gente es, la gente somos, muy desagradecidos, no nos damos cuenta en el caso de sorteos del trabajo que requiere organizarlo y gestionarlo. Desde entonces nunca más.
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